Se encuentra entre los más prestigiosos diseñadores de prendas de Holanda y entusiasma al mundo de la moda europeo con sus creaciones. En 2012, “Mart Visser Haute Couture” celebró su 20º. aniversario, algo digno de celebración y la más hermosa de las motivaciones.
Un murmullo atraviesa las filas pobladas con 1800 invitados cuando la modelo accede a la pasarela con un traje de novia de ensueño, con larga cola, mangas blancas y detalles llenos de arte. Esta creación cargada de estilo es sin duda el punto álgido del cuatrigésimo desfile de Haute Couture de Mark Visser. Para la presentación de su colección aniversario, el diseñador de moda se decidió por el marco ideal: En la localidad holandesa de Vianen y en el marco del “Miele Catwalk”, todos los años se celebra el encuentro de expertos internacionales en estilo, trendsetters y periodistas especializados en moda.
Ya desde la creación de su marca “Mart Visser Haute Couture” en 1992, este creativo holandés propone dos veces al año una nueva colección femenina, llevándose cada vez multitud de elogios y creando entusiasmo. Con su estudio en Ámsterdam, Visser se encuentra hoy por hoy entre los diseñadores de moda más solicitados de Europa. Y esto no es casualidad: los diseños atemporales y nobles de Visser, todos ellos con líneas llenas de sensaciones, combinadas con líneas más puristas, encarnan pura elegancia y feminidad, creaciones modernas, mundanas, duras, sofisticadas... Ya sean largas túnicas de brillante violeta, azul oscuro o bronce, ajustados vestidos con apliques de piel o ligeros sueños de verano en blanco y negro, sus creaciones siempre llevan un sello inconfundible y son muestra de una fuerte personalidad.
El estilo único de Visser fue objeto de atención desde el primer momento para los expertos en moda del prestigioso Saga International Design Centre en Copenhague. Por ello invitaron al por entonces joven diseñador, una vez completados sus estudios en la Montaigne Fashion Academy de Ámsterdam, a realizar un máster en el Saga International Design Centre. Dicho, hecho y, por lo que parece, una buena decisión: Ya durante y poco después de los estudios, Visser fue asistente durante algún tiempo de famosos diseñadores como Frans Molenaar en Ámsterdam, o Anne Klein y Koos von der Akker en Nueva York. Con sólo 25 años, y mucho valor en el equipaje, se decidió a hacer realidad su gran sueño y fundar su propia marca. Que la decisión fue correcta quedó patente durante un evento social: una famosa actriz holandesa apareció ataviada con una de las primeras creaciones de Visser. A partir de ahí, todo fue sobre ruedas.
En la actualidad muchísimas holandesas de las más diversas capas sociales son sus fans incondicionales. También mujeres que no tienen una carrera política, no son gerentes de grandes multinacionales o que ganan su dinero fuera del show-business, adoran las colecciones de Vissser, que actualmente ya abarcan vajillas y complementos. La razón: tienen estilo y elegancia y además se fabrican conforme a los más altos estándares. Y es que la labor tradicional del sastre y los materiales de más alta calidad son elementos indispensables para este creador de alta costura, razón por la que también considera a Miele como el perfecto compañero de camino. Las blusas, vestidos, faldas y pantalones fabricados con dedicación y más que apreciados por sus dueñas simplemente deben permanecer cuidados el mayor tiempo posible, algo de lo que los programas especiales de las lavadoras y secadoras Miele también saben mucho.
Texto: Kim Leclaire